Surface a Samsung Note PRO: la nueva generación de las tabletas
El día que Steve Jobs puso en juego el primer iPad (2007), pocos dentro del gremio de la informática esperaban que ese nuevo dispositivo haría que la férrea salud de la que había gozado el ordenador hasta entonces se resintiese. Con la evolución de las tabletas, los mentideros especializados han avivado el debate sobre la bautizada como «era PostPC». «Es algo que no termina de ocurrir. Hasta ahora no creo que hubiese un sustituto como tal, aunque si se puede hablar de cierta canibalización en las ventas de PC por las tabletas», comenta David Alonso, responsable de B2B de Samsung.
El mayor reto de estos dispositivos para ser una alternativa real al que aún es el rey de la tecnología es que dejen de ser percibidos como una herramienta con la que básicamente se «puede consumir contenido» y no crearlos. Bajo esta premisa, la marca surcoreana ha lanzado al mercado dos nuevas líneas de tabletas -Note PRO, que incluye puntero; y Galaxy Tab PRO- c on unas medidas que van desde las 8,4 pulgadas hasta las 12,2, unos guarismos que abren una nueva dimensión en el mercado.
Equipadas con Android, sus precios llegan hasta los 849 euros del mayor modelo con 4G, unas cifras que rondan el coste de algunos portátiles. Su dimensión permite, entre otras cosas, incorporar baterías más grandes (de hasta 9.500 mAh), el uso de cuatro «apps» al mismo tiempo y «ofrecer una mejor experiencia» a la hora de utilizar «algo fundamental» como el teclado sobre la pantalla. «No podemos olvidar que los usuarios son antiguos usuarios del PC y que quieren usarlo de un modo similar», aclara Alonso, que pone el acento en el software para que esta transición llegue a buen puerto.
Estas novedades de Samsung se unen a otros intentos como la Surface 2 PRO de Microsoft [Review] o el iPad Air de Apple [Review] por añadir prestaciones y potencia con el fin de que se puedan convertir en una herramienta de trabajo, una demanda creciente. «La frontera entre «tablet» y ordenador cada vez es más difusa», explica Antonio Flores, analista de IDC, que predice que el sector colocará 4,5 millones de estas máquinas en España tras los 3,8 millones vendidos en 2013. Asegura que con la aparición de múltiples complementos como teclados o ratones, la mayor diferencia «es la experiencia» en cuanto a las aplicaciones y el sistema operativo.
«La tercera plataforma»
Flores cree que la «tercera plataforma» que surgirá para reemplazar al PC como se conoce estará dominada por la movilidad y aunará la experiencia del tradicional escritorio con la interfaz de estos dispositivos, al estilo de Windows 8. «Los desarrolladores en general y los fabricantes están viendo que se camina hacia esa convergencia», apunta este experto. «El PC va a quedar relegado a un segundo plano que te permitirá una funcionalidad mayor», remacha.
«El gran cambio que está produciendo viene marcado por el tema de la conectividad», opina Eloy Fustero, del fabricante de chips Qualcomm. «Se trata de estar siempre conectado, no únicamente cuando estoy sentado delante del PC sino en cualquier momento. Se trata de crear el contenido que quiero cuando quiero», añade el responsable de desarrollo de negocio del fabricante de chips en España. Aunque afirma que aún no se sabe si las tabletas «se utilizan como una extensión del 'smartphone' o del ordenador», augura «un cambio significativo» en el que además de la capacidad de procesado y todas las ventajas del «cloud computing», la autonomía o la capacidad gráfica tendrán un papel clave.
«Echando la vista atrás unos cuantos años es el dispositivo darwiniano por excelencia. El ordenador va absorbiendo y adaptándose al medio en el que vive», analiza Javier Galiana, responsable español de consumo de Intel, un gigante que ha depositado en los «ultrabooks» -portátiles ligeros y de arranque rápido- y los equipos «híbridos» sus grandes esperanzas.
«En casi ningún caso los usuarios de la tabletas están dejando de utilizar el PC. Si se les estropea lo sustituyen inmediatamente y por otro PC», sostiene, defendiendo que los equipos «dos en uno» -que permiten separar el teclado y que varias marcas como HP o Vaio han lanzado- tienden puentes hacia la nueva experiencia táctil, cada vez más popular. «El componente principal es el rendimiento, que está más asociado a estos equipos», concluye.
